179 aniversarios de luchas y avance hacia la democracia

Por. Daniel Moreno

Cada año el 6 de noviembre, en la República Dominicana, celebramos con orgullo una fecha muy especial, el nacimiento de nuestra constitución, la Constitución Dominicana, un pilar fundamental de nuestra democracia. Este documento, que ha evolucionado a lo largo de los años, refleja los valores y principios que guían nuestra nación. En el Día de la Constitución, es esencial reflexionar sobre su significado y su relevancia en el contexto actual.

La Constitución Dominicana, en su forma actual, fue promulgada en 2010 y ha sido revisada y enmendada varias veces desde entonces. Ha sido un faro que ha guiado nuestro progreso democrático y la protección de los derechos fundamentales de los ciudadanos. Sin embargo, celebrar el Día de la Constitución no debe ser solo una formalidad; debe ser una oportunidad para recordar la importancia de vivir de acuerdo con los valores y principios que esta carta magna encarna.

Uno de los aspectos más destacados de la Constitución Dominicana es su compromiso con la democracia. Establece un sistema de gobierno representativo que otorga poder al pueblo a través de elecciones libres y justas. En un momento en que la democracia se enfrenta a desafíos en todo el mundo, debemos recordar la importancia de defenderla y preservarla en nuestra nación.

La primera Constitución de la República Dominicana firmada en San Cristóbal, luego de que el General Pedro Santana y sus consejeros presionaran a incluir el artículo 210 en 1844.

Además, la Constitución garantiza una serie de derechos fundamentales, como la libertad de expresión, la igualdad ante la ley y el derecho a la educación. Estos derechos son esenciales para el desarrollo de una sociedad justa y equitativa. En el Día de la Constitución, debemos reflexionar sobre la necesidad de proteger y promover estos derechos, no solo en teoría, sino también en la práctica.

La Constitución Dominicana también establece la separación de poderes, lo que garantiza un sistema de control y equilibrio. Esto es crucial para prevenir el abuso de poder y garantizar que ningún grupo o individuo acumule un poder excesivo. En un momento en que la rendición de cuentas y la transparencia son temas candentes en la política global, debemos recordar la importancia de mantener este principio en alta estima.

Sin embargo, no podemos ignorar que, a pesar de nuestros avances democráticos y constitucionales, aún enfrentamos desafíos importantes en la República Dominicana. La corrupción, la desigualdad y la falta de acceso a servicios básicos son problemas que debemos abordar con determinación. En el Día de la Constitución, es importante que nos comprometamos a trabajar juntos para superar estos desafíos y construir una sociedad más justa y equitativa.

El día de la Constitución Dominicana es una oportunidad para celebrar nuestros logros en términos de democracia y derechos, pero también para reflexionar sobre los desafíos que aún debemos superar. Nuestra Constitución es un faro que guía nuestros esfuerzos hacia un futuro mejor. Al comprometernos a vivir de acuerdo con sus valores y principios, podemos construir una sociedad más justa y democrática para las generaciones futuras.

Hoy no solo estamos de fiesta, celebramos con orgullo el nacimiento de la expresión soberana de nuestro pueblo, el día de la  Constitución es más que una fecha en el calendario; es un recordatorio de nuestro compromiso con la democracia y los derechos humanos.